martes, 15 de mayo de 2007

"No podemos hablar por ti"



A todos nos pasa que al estar en confianza con los nuestros nos relajamos y nos mostramos tal como somos, y si a esto añadimos que somos el centro de atención desplegamos el repertorio de chistes y gracias que en circunstancias normales no enseñamos. Hasta aquí todo bien. Lo malo es cuando se es un personaje público y te están grabando, la cosa se agrava si eres un expresidente de gobierno y rajas contra medidas que buscan disminuir la mortalidad de los accidentes de tráfico, y lo empeoras si encima lo haces con copas encima y quieres hacerte el gracioso sin tener ni pizca de gracia.
Esto le ocurrío a Aznar (Anzar para los amigos) despues de catar vinos toda la mañana y de sentirse arropado por los bodegueros de Valladolid.
Supongo que entre cata y cata los bodegueros le comentaban su descontento con la mal llamada ley contra el vino que el gobierno propuso y luego depuso. Le daban vino para probar y rajaban, le pasaban una copita, unos golpecitos en la espalda y más rajaban, venga risas por un lado y por el otro una copita. Fueron entrando en confianza y él fue soltandose la corbata y la lengua, al principio diría que si su partido estuviera gobernando nada de eso hubiese pasado y jajaja todos reidos. Al ver que todos le aplaudían y celebraban su frase se decidío a buscar más reconocimiento con la fórmula de criticar todas las medidas que el gobierno haya sacado: que si la ley del tabaco es una mierda, que si la ley contra la publicidad del burguer king es una jodienda, que la de los matrimonios gays es una mariconada, que la ley de igualdad de generó me toca los... de pronto lo interrumpieron para que saliera al estrado y dijera unas palabras. Con la catadura que llevaba encima, con el ingenio que estaba haciendo gala y con la gracia que desprende siempre, soltó: "¿Y quién te ha dicho que quiero que conduzcas por mí?." Para mayor regocijo de los asistentes, y relacionando la conducción con la bebida de una manera irresponsable, aun sabiendo la problematica que existe en España con este asunto.
Lo que de verdad me hizo gracia fueron las declaraciones de su esposa, según Ana Botella, lo que su marido queria decir era simplemente que el vino de Castilla y León es "estupendo". Dijo además que su esposo está "muy de acuerdo" con las medidas para "evitar que personas que han bebido de más salgan a la carretera". Despues de esto me pregunto si entre Ana y Aznar existe un problema grave de comunicación, o si Ana ha perdido la clarividencia demostrada con su metáfora "peras y manzanas"
Está demostrado que despues de dejar la presidencia el señor Aznar se ha dedicado a su gran pasión: Meter la pata.



"Anzar si bebes, no hables"






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